Análisis regional, ordenamiento territorial y desarrollo local en la región de Aysénescenarios futuros para el desarrollo de la región

Resumen

La Región de Aysén, en el extremo sur de Chile se caracteriza por una condición de rezago en su desarrollo económico, explicado en parte por un aislamiento relativo y la distancia que la separa de los principales centros de consumo del país. A ello se agrega un conjunto de limitaciones para el desarrollo de actividades económicas derivadas de las características físicas del territorio regional. Un relieve muy accidentado heredado de los procesos glaciales a que estuvo sometido; un clima frío y lluvioso y la existencia de una red de islas y canales que dificultan el poblamiento y las comunicaciones, constituyen razones para la situación actual de la Región. Dadas estas condiciones, la región precisa de estudios que ayuden a diseñar estrategias de desarrollo con base en los recursos locales y en las capacidades y potencialidades de que se dispone, a la vez que teniendo presentes las limitaciones propias de un territorio como el que se describe. En este caso se aporta con una discusión sobre las posibilidades de prospectar el futuro de la Región por medio de un conjunto de procedimientos cuantitativos y cualitativos, apoyados sobre una base de sistemas de información geográfica. Para ello se aplica una metodología de prospectiva, junto a antecedentes disponibles en diferentes estudios desarrollados en la Región. Luego se generan modelos territorializados de las proyecciones, aplicando diferentes módulos del software IDRISI Andes, para finalmente incorporar las acciones y previsiones de los agentes públicos y privados en el territorio. El horizonte de planificación se ha establecido en un plazo de 30 años. A manera de conclusión se señala la dificultad de prever el futuro a partir de modelos determinísticos y la necesidad de integrar las visiones de futuro que poseen los agentes de desarrollo en el territorio. La Región de Aysén tiene importantes limitaciones para generar procesos de desarrollo, tanto por las características físicas ya señaladas, como por el hecho de que el 50 % de su territorio se encuentra bajo figuras de protección, lo que reduce la superficie utilizable. Otro aspecto relevante en cuanto a la prospección de futuro para la Región, lo constituyen los proyectos de inversión que se encuentran en diferentes etapas de gestión y que de una u otra manera afectarán al sistema regional. Es el caso de la proyectada construcción de cuatro grandes centrales hidroeléctricas y otras tantas de menor tamaño, que aprovecharán los enormes recursos hídricos disponibles. Estos desarrollos hidroeléctricos están en las etapas iniciales de construcción y están pensados para solventar las demandas energéticas de las regiones del centro y norte de Chile. A esos proyectos se debe agregar el desarrollo de las plantas de cultivo de salmones, las que si bien se encuentran pasando por una etapa de decaimiento a causa de una epidemia de virus ISA, se espera para el futuro inmediato una creciente demanda por espacios para la instalación de nueva infraestructura productiva. También existen algunos proyectos de explotación minera en áreas del norte y del centro de la Región, sobre todo recursos de minería metálica y no metálica. Por otro lado, la Región manifiesta un creciente interés por el desarrollo del turismo de intereses especiales, principalmente aquellos asociados al disfrute de la naturaleza, deportes extremos, turismo aventura y senderismo. Todas estas prácticas se apoyan en la condición de una relativamente baja intensidad de la intervención humana sobre los ecosistemas regionales, por lo que se espera que entren en conflicto con las actividades productivas antes mencionadas. De esta forma el futuro de la Región se percibe como positivo por parte del sector público que prevé un incremento en las inversiones, mientras los privados tienen una mirada algo más cuidadosa y esperan las señales del mercado nacional e internacional antes de decidir sus proyectos. Esto es válido particularmente para los proyectos hidroenergéticos, de acuicultura y los de turismo. Entre los eventos más destacados que pueden alterar las condiciones a futuro se encuentra, en primer lugar la concretización de las cuatro grandes centrales hidroeléctricas, que pueden alterar significativamente, no sólo el balance económico regional, sino sobre todo la estructura territorial de la mitad sur de la Región. A ello se puede agregar la consolidación de la red de comunicaciones intra e inter regional, que significaría un incremento en la accesibilidad a los mercados. Por último, en la percepción de los diferentes actores regionales, se encuentra un conjunto de posibles ámbitos productivos que deben investigarse y que pueden significar importantes fuentes de empleo y crecimiento económico, como es el caso de la producción de flores y bulbos. De esta forma, la construcción y mejoramiento de infraestructura de apoyo a la producción, la incorporación de nuevos rubros productivos y el fortalecimiento de los ya existente en la Región, vienen a marcar los principales aspectos a considerar en las condiciones del futuro de Aysén.