El Hospital de las Cinco Llagashistoria y documentos. Tomo I y II

  1. Calderón Berrocal, María del Carmen
Dirigida por:
  1. Antonio Sánchez González Director

Universidad de defensa: Universidad de Huelva

Fecha de defensa: 29 de enero de 2016

Tribunal:
  1. David González Cruz Presidente
  2. Alicia Marchant Rivera Secretario/a
  3. Manuel Martín Riego Vocal
Departamento:
  1. HISTORIA, GEOGRAFIA Y ANTROPOLOGIA

Tipo: Tesis

Teseo: 411340 DIALNET

Resumen

El trabajo, de acuerdo con su propio título, está estructurado en dos partes diferenciadas, que se presentan en dos volúmenes. El primero de ellos está dedicado a la HISTORIA del Hospital, en nueve capítulos, y el segundo, con otros tres capítulos adicionales, se refiere a los DOCUMENTOS que reunió la institución a lo largo de sus casi cinco siglos de vida prestando servicios de atención a los enfermos y a los más necesitados de la sociedad. Dentro de la primera parte histórica, presentamos en el primer capítulo la etapa fundacional, que transcurre entre 1500 y 1539. Se trata de la gestación del Hospital, intramuros de la ciudad de Sevilla, por parte de las dos personas que podemos considerar fundadores de la obra pía, doña Catalina de Ribera y su hijo Fadrique Enríquez. Pero también nos fijamos aquí en los antecedentes familiares que posibilitaron la dotación del inmueble, en sus bulas y privilegios fundacionales. Se descubre además el primer emplazamiento que tuvo en la ciudad el Hospital de las Cinco Llagas, localizándolo en planimetría. Se trata también sobre su cúpula espiritual y gestora, sus iniciales Constituciones y los recursos humanos con los que contaba en esta primera fase. Concluye la etapa fundacional planteando la necesidad que tiene el establecimiento de un cambio en su sede, ya en tiempos del Marqués de Tarifa don Fadrique, y con la dotación económica que éste le lega para hacerlo posible. El segundo capítulo sigue la trayectoria histórica de la institución a partir de 1540, fase claramente marcada por la preparación y construcción del nuevo y gran Hospital de las Cinco Llagas en las afueras de la ciudad, al pie de la muralla almohade, frente a la puerta de La Macarena. El tercer capítulo trata de desentrañar todos los entresijos del gobierno del Hospital, hablando de su patronato rector, de las relaciones que mantuvieron estos patronos con los descendientes de los fundadores en diversos momentos, caracterizados por el enfrentamiento, y de la jurisdicción especial del territorio del Hospital que afecta a todos los que pisen su suelo. Tratamiento especial han tenido las Constituciones que regularon la vida del Hospital hasta el siglo XIX, a lo que dedicamos el cuarto capítulo, pues según los tiempos y el desenvolvimiento del Hospital, fueron evolucionando hasta que el establecimiento quedara bajo custodia de la Beneficencia del Estado, a cargo del Municipio y la Diputación. El quinto capítulo trata sobre la administración y el servicio del Hospital, desarrollando aquí todos y cada uno de los puestos y cargos que se desempeñan en Las Cinco Llagas, así como los salarios y raciones que este personal recibe por sus servicios. Otro aspecto que se contempla es el régimen de visitas a la institución. El sexto capítulo trata de acercamos a la economía del Hospital, aproximándonos a lo que debieron ser sus cimientos económicos, en gran parte aumentados con varios legados importantes de diversos benefactores, que crearon varias fundaciones anexas al propia Hospital como el patronato de Convalecientes de Diego de Yanguas. En él comentamos sus principales propiedades y rentas, tratando además -aunque más a nivel teórico que contable- sobre los aportes de indulgencias, limosnas, diezmos, juros, censos y obvenciones. Del funcionamiento de la institución se trata en el capítulo séptimo, donde abordamos los cuidados espirituales (cura animarum) y médicos (cura corporum) que reciben los enfermos en el Hospital. El capítulo octavo versa sobre dos aspectos plenamente encuadrables en el siglo XVIII, como fueron el reglamento de cirujanos que se le aplicó por real orden de Carlos III de 1764 y del �campo del Hospital� y las relaciones de la institución con el vecindario. Y ya en el capítulo noveno, tratamos sobre las grandes transformaciones que se dan en el Hospital durante los siglos XIX y XX, para finalizar con su degradación progresiva que obligó a su cierre en 1972 y al posterior y necesario proceso de restauración y reconversión que recibió hasta convertirse en lo que hoy es, el Parlamento de Andalucía. Ya dentro de la segunda parte, referida a los documentos se incluyen normas ISASD (G), Cuadro de Clasificación, Inventario, Catálogo General y Apéndice documental.