Vertebrados marinos del neógeno del suroeste de la península Ibérica

  1. Toscano Grande, Antonio
Dirigida por:
  1. Francisco Ruiz Muñoz Director

Universidad de defensa: Universidad de Huelva

Fecha de defensa: 10 de febrero de 2016

Tribunal:
  1. Miguel Carlos Ferreira Telles Antunes Presidente/a
  2. Josep Tosquella Angrill Secretario
  3. Ausenda Cáceres Balbino Vocal
Departamento:
  1. CIENCIAS DE LA TIERRA

Tipo: Tesis

Resumen

Esta Tesis Doctoral aborda el estudio de los vertebrados marinos presentes en las formaciones del Mioceno y Plioceno del SO de la Cuenca del Guadalquivir en la provincia de Huelva, sus aspectos evolutivos e implicaciones paleoecológicas. Los resultados obtenidos permiten definir con mayor resolución la evolución de los ecosistemas litorales y marinos del SO de la Península Ibérica durante el Neógeno superior. Durante esta época, las dos principales vías de comunicación entre el océano Atlántico y el mar Mediterráneo eran el Estrecho Norbético, al Norte, y el Estrecho Rifeño, al Sur. La zona de estudio, por su situación paleogeográfica entre Atlántico y Mediterráneo, se encuentra en una ubicación privilegiada para el estudio del registro fósil de estos grupos. Los materiales neógenos estudiados pertenecen a las siguientes formaciones: Fm. Niebla (Tortoniense sup.), Fm. Arcillas de Gibraleón (Tortoniense sup.-Messiniense), y Fm. Arenas de Huelva (Plioceno inf.). Se seleccionaron aquellos yacimientos representativos y se llevó a cabo tanto un muestreo sistemático (350 kg.), así como búsquedas en superficie. A la vez, se realizó una cartografía de facies y los cortes geológicos. Las muestras fueron tamizadas en laboratorio con el fin de separar los restos de pequeños vertebrados, y microfósiles para detallar las condiciones paleoecológicas y su datación. También se han limpiado y consolidado restos fósiles de grandes vertebrados. Los restos fueron catalogados y etiquetados y fotografiados. En conjunto, se han obtenido más de 3000 ejemplares de dientes, 230 de otolitos y 2000 de restos óseos, además de 8 esqueletos de cetáceos. Se han determinado 116 taxones de vertebrados marinos del Neógeno de Huelva. De ellos, se han identificado 50 especies de seláceos (tiburones y rayas), 5 de holocéfalos (quimeras), 48 de osteíctios (peces óseos), 1 de ave, 2 de tortugas marinas y 10 de mamíferos marinos (2 de foca, 4 de cetáceos misticetos y 4 de cetáceos odontocetos). Cabe mencionar que 32 especies de peces, 8 de mamíferos marinos, las 2 de tortugas y 1 del ave, en total 43 taxones, son especies citadas por primera vez en la zona, de las que 16 de ellas lo son también por primera vez en España. Todo ello conforma una gran aportación en lo referente a las paleocomunidades de vertebrados y sus implicaciones para la comprensión de las cadenas tróficas del pasado. Los datos han permitido establecer una aproximación paleoecológica, paleobiogeográfica y biocronológica del medio. Así, la Fm. Niebla es característica de un medio costero somero de aguas cálidas subtropicales; la Fm. Arcillas de Gibraleón indica un medio profundo y alejado de la costa, con faunas de mar abierto y de la zona superior del talud continental, entre unos 150 y 400 m de profundidad. La Fm. Arenas de Huelva sería un área más somera, de plataforma continental, algo más profunda en su base y menos en su techo, desde unos 100 a unos 30 m de profundidad. En ella incrementa considerablemente la fauna tanto en número como en diversidad. La somerización por la colmatación de la Cuenca del Guadalquivir queda bien registrada en las asociaciones de vertebrados. Los fósiles indican una mezcla de especies de aguas templadas y cálidas, con predominio de estas últimas. Esto indicaría un clima subtropical, algo más cálido que el que actualmente tiene la zona. Además, se compararon las comunidades de vertebrados con otras del Neógeno superior de Portugal, Messiniense de Grecia, Plioceno de Cataluña, C. Valenciana, Baleares y Murcia, Plioceno italiano y Plioceno del sureste de Francia. Todo ello supone una mejora en la comprensión del ecosistema marino y de la evolución paleoambiental del Suroeste de la Península Ibérica durante el final de la era Terciaria o Cenozoica.