Eficacia de un programa de formación del profesorado de primaria para la enseñanza bilingüe

  1. Alonso Pérez Tinao, María Teresa
Dirigida por:
  1. Olga Buzón-García Director/a
  2. Ángeles Rebollo-Catalán Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Sevilla

Fecha de defensa: 08 de febrero de 2016

Tribunal:
  1. Esperanza María Ceballos Vacas Presidente/a
  2. Rafael García Pérez Secretario/a
  3. Patricia Arnaiz Castro Vocal
  4. Ángel Boza Carreño Vocal
  5. María Teresa Pozo Llorente Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 395689 DIALNET

Resumen

El reto de la enseñanza bilingüe va más allá de la mejora del aprendizaje de idiomas, supone un cambio en la forma de entender la educación. ¿Cuál es el estado de la cuestión en educación? La situación es que desde hace tiempo muchos pensadores, profesores, y la sociedad en general, ven la necesidad imperiosa de un cambio en educación, pero esta transformación parece tardar en llegar a las aulas. Como Fullan (2002) nos preguntamos si -¿Acaso el sistema educativo y sus miembros no están abiertos al cambio o no son capaces de él? (p. 13) Senge (2014) señala que debajo de todo subyace un cambio de mentalidad. Con esta realidad vimos que había un camino por explorar para promover el cambio de la escuela en un entorno donde el profesorado estaba abierto a abordar nuevos retos, es el espacio de las escuelas bilingües, en ellas hemos encontrado a mucho profesorado dispuesto a emprender nuevos enfoques. De esta forma esbozamos cuál es el objetivo del Programa de Aprendizaje Rentable, PAR, como una vía de promover el cambio en las aulas. El PAR consiste en un plan de formación para el profesorado de programas bilingües en Primaria que tiene como objeto optimizar su implantación, mejorar claramente los resultados de aprendizaje del alumnado y facilitar al profesorado alcanzar seguridad y soltura para impartir clases en una segunda lengua, promoviendo en los docentes una clara disposición al cambio y a continuar aprendiendo y desarrollando su perfil profesional y personal. Siguiendo una línea europea España ha comenzado a implantar programas bilingües en las escuelas a través de una metodología denominada AICLE (Aprendizaje Integrado de Contenidos y Lenguas, CLIL en inglés), que tiene una fuerza de arraigo y desarrollo grande (Coyle, 2010). ¿Qué añade nuestra investigación a un enfoque tan prestigioso y bien valorado como CLIL? El reto está en la formación eficaz del profesorado. CLIL es ecléctico, amplio, requiere aceptar un cambio de paradigma sobre la tarea docente, pero es necesario trasladarlo a las aulas con eficacia. Aunque se ha hecho mucha formación sobre CLIL parte del profesorado no termina de llevar las propuestas al aula y nos hemos preguntado las razones. El planteamiento que hacemos para la mejora de la formación del profesorado aborda un asunto complejo ya que, como afirma Sánchez (2009), menos del veinte por ciento de lo que se aborda en ella llega a influir en la vida del aula. La propuesta que presentamos se llama Programa de Aprendizaje Rentable en dos sentidos. Con respecto al profesorado, es nuestro objetivo conseguir que la formación sea una vía eficaz en la que los docentes puedan apoyarse para abordar el cambio. Y con respecto a los resultados de aprendizaje del alumnado el objetivo de la investigación es que los aprendices alcancen metas reales en cuanto comprensión del contenido del área y a desarrollo de destrezas y que lo hagan a gusto utilizando siempre la lengua meta. En esencia buscamos que el alumnado aspire a objetivos lingüísticos que no suelen ser comunes, como alcanzar la fluidez oral. Hablar sin fluidez es casi no hablar. Con nuestra investigación queremos demostrar que el aprendizaje es rentable en el sentido de que se obtienen resultados visibles y medibles en pocos meses en cuanto a la capacidad de comunicación oral. La base fundamental de nuestra propuesta de investigación, el Programa de Aprendizaje Rentable, PAR, está, como ya hemos dicho, en CLIL, y uno de los objetivos más claros a sido hacer visible el lenguaje implicado. CLIL es un entorno dual, donde se aprenden a la vez los contenidos del área y la lengua meta, pero esta, al ser un vehículo, puede quedar invisibilizada. Hemos aportado una forma de traer a primera línea el lenguaje, sin perder la atención en los contenidos y objetivos del área. Para construir el PAR hemos profundizado acerca de la valoración de la diversidad a través de la teoría de las Inteligencias Múltiples (Gardner, 2005), y hemos incorporado el aprendizaje cooperativo (Kagan, 2009), como una fuente inagotable de aprendizaje compartido. Hemos atendido a los diferentes sistemas de representación de cada aprendiz (Barbe, 1979), dando un espacio en la formación a la creación y diseño de materiales para el aprendizaje. El PAR se basa en el cambio en la evaluación para cimentar y facilitar el cambio en la forma de aprender y enseñar. Hemos propuesto al profesorado utilizar Total Physical Response, (TPR) (Asher, 1969) como una herramienta más para asegurar el aprendizaje de y en una segunda lengua. Con Krashen (1985) hemos valorado la profundidad del enfoque natural como la forma más eficaz de adquirir un idioma. El programa valora grandemente la luz que aportan ideas de Krashen como el input comprensible o el filtro afectivo y promueve la creación de entornos seguros, donde el error es un recurso más para aprender, la colaboración es un medio que facilita afrontar la dificultad, y estar a gusto es un objetivo del aula. Basándonos en Segalowitz (2010) hemos retomado el interés por la automaticidad en el lenguaje y hemos comprobado que solo podemos hablar con fluidez si tenemos al menos parte del lenguaje automatizado, igual que nos ocurre en la lengua materna. La aportación que hemos hecho es la forma de automatizar el lenguaje en un entorno comunicativo donde el significado se prioriza sobre la atención a la forma. El aprendizaje se centra en la realización de una tarea final, Task based learning, (TBL) (Estaire, 1990), que es la forma más actualizada de los enfoques comunicativos. Una vez creado el programa de formación hemos trabajado con profesorado que nunca antes había participado en programas bilingües y cuyo nivel de inglés no era avanzado. Además de la formación presencial de quince horas acompañamos al profesorado durante un curso escolar (2013-2014), atendiendo a sus consultas. A cambio los docentes nos permitieron evaluar a su alumnado mediante un test de nivel oral y la realización de cuestionarios. También contamos con información sobre el profesorado a través de cuestionarios, entrevistas y vídeos. Realizamos una evaluación externa al alumnado participante en la investigación (experimental y de control), para medir su nivel de comunicación oral en la segunda lengua, su capacidad de comprensión y de fluidez. Los resultados de la investigación han sido buenos y hemos constatado que el profesorado en poco tiempo se siente cómodo dando clases en una lengua extranjera. A su vez el alumnado percibe que ha aprendido sobre el área impartida en bilingüe y se siente satisfecho de saber que es capaz de entender y responder sobre los contenidos trabajados en otra lengua. No hemos querido volar bajo sino que hemos pretendido participar en el cambio de la escuela, en su innovación para su transformación. Estamos satisfechos de lo realizado porque hemos comprobado que vamos hacia una escuela sostenible, en la que docentes y alumnado aprenden juntos (Gardner, 2005), perciben su progreso y están involucrados. Dos años después el profesorado participante sigue interesado en el aprendizaje, introduciendo cambios y aprendiendo. Una escuela así será capaz de mantenerse al día, viva y eficaz para promover una sociedad más justa, más abierta y acogedora, y podrá construir un futuro mejor para el ser humano. ¿No es esa la razón de ser de la escuela?