Vegetación general de Huelva

  1. Pablo J. Hidalgo Fernández 1
  1. 1 Universidad de Huelva. Centro de Investigación RENSMA
Libro:
Biología de Huelva: Naturaleza, Biodiversidad, Bioindicadores y Biomarcadores
  1. Rafael Torronteras Santiago (ed. lit.)

Editorial: Universidad de Huelva

ISBN: 978-84-18984-95-2

Año de publicación: 2022

Páginas: 115-144

Tipo: Capítulo de Libro

Resumen

La provincia de Huelva es la de mayor superficie arbolada de Andalucía, aunque la mayoría de estos bosquesproceden de plantaciones forestales, algunas muy antiguas. No obstante, aún conserva grandes extensionesde vegetación natural derivada de los enormes bosques mediterráneos de encina y alcornoque que poblaban laPenínsula Ibérica. Se pueden identificar distintos tipos de encinares y alcornocales dependiendo de la litología yel bioclima. Muchos de ellos se encuentran profundamente transformados, ya que han perdido el estrato arbustivoal convertirlos en dehesas. Aunque no muy abundantes, también es posible identificar algunos bosques de melojoen el norte de la provincia y salpicando algunas zonas localizamos quejigos. Las distintas etapas de degradaciónde estos bosques conducen a matorrales, tanto seriales como nobles, que se extienden por numerosas zonasdegradadas de la provincia. Se trata de jarales-aulagares, jarales-brezales, madroñales, lentiscares, etc. En losbarrancos y afloramientos rocosos se da una vegetación muy particular, denominada casmofítica, que es ricaen endemismos. En los entornos riparios, cuando el cauce es permanente, es posible detectar algunas de lasformaciones típicas del bosque de ribera, entre las que destacan las saucedas, alisedas y fresnedas. Cuandoel cauce es estacional o intermitente, aparecen formaciones típicas de cauces mediterráneos con fuerte estiajecomo adelfares, zarzales, tarajales y tamujares. Con respecto a las plantaciones forestales, son muy frecuentes lasde pinares y eucaliptares. En muchos casos, estos pinares, se han naturalizado. Finalmente, en el corazón de lasierra, existen abundantes castañares, introducidos desde hace siglos para la explotación de su fruto y la madera.